PARTIDO GANADO- PARTIDO PERDIDO
Una defensa irregular
Los albicelestes controlaban el partido sin grandes esfuerzos; el marcador les favorecía y los acontecimientos en el césped hacían suponer una victoria holgada a su favor. Dos penaltis fallados por los verdiblancos fueron la gota que desbordó el vaso para que sus rivales se relajaran más de la cuenta. Pascal, que el miércóles pasado fue una muralla en la defensa, se alejó de aquella demarcación; y Vélez jugó más de centrocampista que de central; estas alegrías se pagaron con siete contundentes goles.
¿Qué motivó semejante desbarajuste? La puerta defendida por Paco "Panadero" que, harto de ser considerado portero suplente, demostró que sabe defender la portería con bastante eficacia; puede que no haga las palomitas que Cortés o Andrés, pero sale del área con contundencia y se sitúa bajo los palos con no menos eficacia.
El resto lo hicieron Ángel con su clase en el centro del campo, delante de la defensa; Aguilera y Felipe que marcaron tres goles cada uno, Juan "Lila" repartiendo juego con maestría, y una defensa firme y organizada que blindó el área tras los dos goles de Gérôme (El Benzema albiceleste).
La segunda parte del encuentro los verdes anularon el ataque azul; mucho centrocampismo por parte de estos últimos, pero que no se tradujo en goles. Los verdes hilvanaron jugadas con muchos apoyos y con gran inteligencia y volvieron locos a la defensa contraria que, mirándose entre ellos, se preguntaban qué ocurría.
Varapalo albiceleste que celebraron los verdiblancos con grandes goles (Felipe fue el autor de uno de los más bonitos de la temporada); sobre todo su cancerbero que, al final del encuentro, se comió una torta de su cosecha con la mayor de las satisfaciones.
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